¿Cuál es el efecto que tiene en otros una personalidad encantadora, PE?

De todas las definiciones ofrecidas por mis encantadores amigos, conocidos y familiares, aprendí lo extraña que es la vida, pues la persona de PE no busca por ninguna forma cambiarte, juzgarte ni malinterpretar a los demás, sino que más bien busca la comprensión, la aceptación, y expresar amor. Cualidades que poseen la fuerza más grande de este planeta para producir, lograr e inspirar los cambios más significativos en el comportamiento y en la personalidad del ser humano.

Y es que paradójicamente las personas de PE sirven de elemento positivo para influir, inspirar y motivar a los demás a ser mejores, a ser y a convertirse en una mejor versión de ellos mismos. “Efecto casi imperceptible tanto para el que influye, como para el que es influenciado”. 

Tal y como se ve dicho efecto al aprender e investigar sobre la vida de personajes como la princesa Lady Di, conocida como la princesa Diana de Gales, la Madre Teresa de Calcuta, o sobre el caso de la cantante mexicana llamada Selena. Quienes se caracterizaron por la sencillez, la humildad, el carisma,  la amabilidad y el amor con el que se dirigían y se relacionaban con las personas. Inspirando y sembrando esperanza por donde sea que se encontrasen. conquistando sin ni siquiera proponérselo el respeto, la admiración y el amor de las personas.  Logrando lo que ellas mismas ofrecían.

Entonces no es de extrañarse que cuando miramos el pasado lloramos, y recordamos con nostalgia a esas personas que nos han enseñado tanto por medio de su amor, de la paz y la alegría que infundían o infunden en su trato y en su manera de proceder. No es en vano que anhelemos volverles a ver y estrecharles en un fuerte abraso, o escucharles hablar, reír o hasta llorar. Porque en sus semblantes siempre había esa luz con la que iluminaban todo lo que les rodeaba. 

Y sobre todo, porque al estar junto a ellos todo parecía más sencillo, más sublime, más especial, más bello. Desconociendo que todo eso estaba en nuestro interior inspirado por la mera aceptación que esas personas nos manifestaban. De lo cual la psicología nos enseña que aquello que realmente extrañamos es el cómo nos sentíamos nosotros mismos al estar junto a esa persona de personalidad encantadora.